Violencia extrema contra presos del 11J en Melena del Sur: activista denuncia golpizas y castigos inhumanos

La activista cubana Anamely Ramos denunció este domingo un nuevo episodio de violencia brutal contra presos políticos del 11J en la prisión de Melena del Sur, provincia Mayabeque, donde, según testimonios recibidos, la represión ha alcanzado niveles alarmantes tras la llegada de un nuevo jefe militar.

En una publicación en su perfil de Facebook, Ramos compartió el testimonio del preso político Aníbal Yasiel Jacinto Palau, quien participó recientemente en una protesta pacífica dentro del penal junto a sus compañeros de causa Maykel Puig Bergolla y Juan Enrique Pérez. Este último, según la denuncia, inició la manifestación saliendo vestido de blanco con un cartel que decía: “Difamar también es delito. Patria y Vida”, y luego se cosió la boca frente a los demás reclusos en señal de protesta.

“Los guardias lo golpearon con total ensañamiento”, denunció Ramos, añadiendo que Pérez fue llevado a una celda de castigo y actualmente se desconoce su estado de salud. Tanto Aníbal como Maykel también fueron golpeados salvajemente al secundar la protesta. “Desde que convivieron juntos en la prisión de Quivicán, esos jóvenes han formado una hermandad inquebrantable. Ninguno deja a nadie atrás”, escribió la activista.

Ramos responsabilizó directamente a varios oficiales de la prisión por estos actos de violencia, entre ellos:

• Lázaro Yunior Santana Figueroa, jefe de todas las prisiones de Mayabeque, señalado como quien ordena las represiones sin implicarse directamente.

• Rudi Méndez Acosta, teniente coronel y primer jefe del penal.

• Stany Lolo Villa y Luis (aún sin apellidos), segundos jefes de la prisión.

• Eduardo Ramos Enamorado, jefe de tratamiento educativo.

• Yordanis Rodríguez Valenciano, oficial de guardia operativa.

• Rody (alias “el culón” o “el fondillúo”), jefe de orden interior, cuyos apellidos también están aún por confirmar.

“Cada uno de ellos es responsable por la vida y la integridad física y psicológica de nuestros presos”, advirtió la activista, quien llamó a compartir esta información y denunciar públicamente a los implicados. “Que no haya lugar en el mundo donde puedan esconderse y dar la espalda a sus atrocidades”.

Ramos también cuestionó la indiferencia de la comunidad internacional y de los propios cubanos ante el sufrimiento de estos jóvenes, que desde hace casi cuatro años enfrentan condiciones extremas de violencia física y psicológica en las cárceles del régimen. “¿Los cubanos con vergüenza nos vamos a quedar simplemente mirando y esperando impasibles el peor de los finales?”, se preguntó.

La activista concluyó su publicación exigiendo la libertad inmediata de estos prisioneros y de todos los presos políticos en Cuba, y pidió a medios nacionales e internacionales, así como a organizaciones de derechos humanos, que pongan la mirada sobre lo que ocurre en las cárceles cubanas: #MirenLasPrisionesEnCuba.