Vecinos de Luyanó denuncian venta de drogas con una pintada en plena calle

En un acto de desesperación y hartazgo, vecinos del barrio de Luyanó, en La Habana, decidieron denunciar públicamente la venta de drogas en su comunidad con un grafiti de grandes proporciones que decía: “Aquí se vende químico”. El mensaje, pintado en letras blancas sobre el pavimento de la calle Pérez, fue captado por el diario independiente 14ymedio, que recogió el testimonio de residentes de la zona.

La frase hace alusión a un cannabinoide sintético conocido popularmente como “químico”, una droga de bajo costo que ha ganado terreno entre los jóvenes cubanos debido a su potente efecto y facilidad de acceso. Aunque su comercialización es ilegal, su consumo se ha normalizado en varios barrios habaneros ante la mirada indiferente de las autoridades.

“Por ahí la gente evita pasar”, relató una vecina identificada como María, citada por 14ymedio. Otro residente añadió: “Aquí vende químico mucha gente. Unos lo hacen más discreto que otros”. Según los testimonios, la cuadra señalada es conocida por las fiestas ruidosas, peleas y consumo de sustancias en plena vía pública.

La policía, pese a la evidente denuncia, no acudió de inmediato al lugar. La pintada permaneció visible durante horas hasta que fue finalmente borrada, sin que se conociera de ninguna intervención oficial. Esto ocurre justo después de que el régimen cubano concluyera su llamado “Tercer Ejercicio de Prevención y Enfrentamiento a los Ilícitos de Drogas”, una campaña propagandística que, como evidencian los hechos en Luyanó, no ha tenido impacto real en los barrios más golpeados por el narcotráfico.

En medio del colapso económico, la falta de oportunidades y el deterioro institucional, la droga encuentra terreno fértil en las comunidades cubanas. El grafiti de Luyanó no es un hecho aislado, sino un grito de auxilio que expone el vacío de poder, la complicidad y la impunidad con que operan los vendedores de sustancias en Cuba.

Desde ClickCuba, seguiremos visibilizando estas realidades que el régimen pretende silenciar. Porque en Cuba, denunciar también es resistir.