Díaz-Canel en Corralillo: Una visita marcada por la indignación y la manipulación mediática

La reciente visita del presidente designado de Cuba, Miguel Díaz-Canel, a Corralillo, Villa Clara, ha generado una ola de indignación entre los habitantes del municipio y quienes conocen la realidad detrás de su recorrido. A través del perfil de Facebook «Soy Corralillo» se publicó un mensaje celebrando la visita como un acto espontáneo de bienvenida, destacando supuestas palabras de aliento del mandatario y su preocupación por los molestos apagones que afectan al país.

Sin embargo, fuentes cercanas que trabajan en el lugar y prefieren mantenerse en el anonimato aseguran que la visita de Díaz-Canel estuvo lejos de ser un encuentro con el pueblo. Las imágenes divulgadas fueron tomadas en una granja militar perteneciente a AGROFAR de Corralillo, destinada exclusivamente a abastecer a altos mandos militares, dejando al margen a la población civil que enfrenta una crisis alimentaria sin precedentes.

«Esos campos arroceros no son para resolver el problema alimentario del pueblo, sino para los militares de alto rango. Los soldados apenas reciben lo mínimo para subsistir, mientras que en la granja se siembra arroz, yuca, viandas, hortalizas y se crían pollos exclusivamente para la cúpula militar», denuncian las fuentes.

Las imágenes de la visita muestran a Díaz-Canel caminando entre la multitud, rodeado de personas que registran el momento con sus teléfonos móviles. Aunque la intención del régimen es proyectar una imagen de cercanía y respaldo popular, testigos aseguran que la convocatoria fue orquestada, con la presencia de funcionarios del gobierno y miembros de la Seguridad del Estado para evitar cualquier confrontación o cuestionamiento espontáneo.

El descontento por la visita de Díaz-Canel se suma a la creciente frustración de los cubanos, quienes ven cómo los recursos del país se destinan a la elite castrense mientras la población enfrenta hambre y precariedad. La narrativa de «cálida bienvenida» promovida en redes sociales contrasta con la realidad de un país sumido en la desesperanza y la desigualdad.

También se mencionó en la visita la instalación de parques solares como parte de una estrategia para disminuir las afectaciones del sistema eléctrico. Sin embargo, los habitantes de Corralillo saben que el problema de los apagones está lejos de resolverse y que las prioridades del gobierno no están enfocadas en mejorar la calidad de vida de la población.

En un contexto donde el régimen intenta maquillar su imagen con visitas calculadas y discursos vacíos, la población sigue sin respuestas concretas a la crisis que asfixia a Cuba. Pero, como tantas veces antes, parece que el régimen sigue gobernando de espaldas a la realidad.