La madre del actor cubano Carlos Massola, expresó este sábado su sentir por la pérdida de su único hijo. Gladys Escandell Pérez, en un emotivo video publicado en el medio independiente Cubanet, agradeció las muestras de respeto y solidaridad recibidas de amigos y colegas de su hijo, incluyendo directores y actores cubanos.

«Gracias a todas las personas que se han solidarizado con su muerte, se los agradezco muchísimo», dijo Escandell Pérez. Sin embargo, también criticó a quienes han emitido opiniones malintencionadas y tergiversado la realidad. «Hay personas que no han dicho las verdades como se dicen», añadió.

La madre del actor, visiblemente afectada, señaló que «en estos momentos, aquí en Cuba hay compañeros que han trabajado con él… que me han llamado, se han solidarizado conmigo, porque me conocen y saben que mi mente en estos momentos y en todos los momentos ha estado en perfectas condiciones».

Gladys Escandell Pérez relató los días previos al fallecimiento de su hijo, explicando que Carlos Massola decidió encerrarse en su cuarto durante cuatro días y no permitió que nadie, ni siquiera ella, ingresara. «Carlos se negó a ir al médico, él se sentía mal y yo por no disgustarlo, no le abrí el cuarto. Le decía por la puerta que tenía que ir al médico, pero él se negó», contó. «Si él se encerró en ese cuarto es porque no quiso ver médico, no quiso ver nada. Fue su decisión», reiteró Escandell Pérez para aclarar malentendidos y rumores.

Con lágrimas en los ojos, Gladys Escandell Pérez pidió respeto y compasión hacia su hijo fallecido. «Carlos era mi único hijo, ¿quién no ama a un hijo?, por favor, respeten un poco», suplicó.

Carlos Massola, quien falleció a los 62 años debido a un shock hipovolémico, según informó un médico de la familia, fue incinerado conforme a su voluntad. Su hija denunció en una transmisión en Facebook una espera de siete horas por el carro fúnebre, tras lo cual el cuerpo del actor fue trasladado a la funeraria Bernardo García con ayuda de los bomberos.

Massola, conocido por sus denuncias contra los abusos del gobierno cubano, se había convertido en una figura incómoda para el régimen. Su muerte fue ignorada por las autoridades culturales de Cuba y los medios de prensa estatales. La Asamblea de Cineastas Cubanos publicó un escueto comunicado más de 24 horas después del deceso, utilizando eufemismos para referirse a la rebeldía política del actor.

A pesar del silencio oficial, Carlos Massola recibió homenajes de muchos de sus colegas y el cariño del pueblo cubano, que valoró su valentía para manifestar sus ideas políticas y denunciar la ineficacia, corrupción y violaciones de derechos humanos de la dictadura