Una comida de fin de año para quienes más lo necesitan

Un gesto de dignidad en medio de la necesidad: Bar K5 y Restaurante Casaquinta ofrecerán comida gratuita a personas vulnerables este 31 de diciembre

Por tercer año consecutivo, el Bar K5 y el Restaurante Casaquinta volverán a abrir sus puertas el 31 de diciembre para ofrecer una comida gratuita de fin de año a personas en situación de calle y a los más necesitados de su zona. La iniciativa, impulsada por el empresario Hugo Puig González, se ha convertido en un gesto sostenido de solidaridad en un contexto marcado por la precariedad y la exclusión social.

A través de una publicación en redes sociales, Puig González confirmó que la comida se realizará el próximo 31 de diciembre a las 3:00 de la tarde, en la terraza del Bar K5, y estará destinada exclusivamente a personas que atraviesan situaciones de vulnerabilidad extrema. El anuncio responde, según explicó, a las numerosas preguntas recibidas en los últimos días por parte de trabajadores, amistades y vecinos que querían saber si este año se repetiría la acción solidaria.

“El objetivo es que estas personas sientan que importan, que también merecen un 31 de diciembre feliz”, expresó Puig González, subrayando que se trata de una iniciativa organizada dentro de las posibilidades reales de los establecimientos, sin ánimo de lucro ni promoción personal.

El organizador hizo, además, un llamado claro a la responsabilidad colectiva. La comida gratuita no está pensada para quienes pueden costearse una celebración, sino para quienes no tienen otra alternativa. “Si alguien que no lo necesita ocupa ese lugar, puede estar privando a otra persona de su única comida especial en estas fechas”, advirtió, apelando a la empatía y la conciencia social.

Más allá del evento puntual, la publicación también abre la puerta a la colaboración ciudadana. Puig González compartió los datos de contacto y las cuentas habilitadas del grupo solidario “Con Amor Todos Juntos”, una iniciativa que brinda ayuda durante todo el año a personas en situación de calle, enfermos y otros sectores desfavorecidos. Quienes deseen contribuir pueden hacerlo mediante donaciones en moneda nacional o en MLC, así como contactando directamente al grupo para coordinar apoyos.

En un entorno donde la pobreza y la exclusión suelen normalizarse, acciones como esta recuerdan que la solidaridad no es un gesto aislado, sino una práctica sostenida que puede marcar la diferencia, al menos por un día, en la vida de quienes más lo necesitan.