Indignación en Santiago de Cuba: denuncian venta de módulos de donación a 3.000 pesos

Una nueva denuncia ha sacudido a Santiago de Cuba en medio de la profunda crisis que vive la provincia tras el paso del huracán Melissa. El periodista independiente Yosmany Mayeta Labrada publicó este 13 de noviembre imágenes y testimonios que señalan que módulos de ayuda humanitaria —enviados desde el extranjero para aliviar la emergencia— están siendo vendidos a 3.000 pesos cubanos, en lugar de entregarse gratuitamente a las familias afectadas.

Las fotografías compartidas muestran uno de los paquetes dentro de bolsas con el sello de la Embajada de la República Dominicana, evidencia de su origen como donación internacional.

“¿Cómo es posible que una donación termine convertida en negocio?”

En su publicación, Mayeta cuestionó abiertamente la falta de transparencia:

“Alguien que me explique —con argumentos reales y no con discursos vacíos— por qué un módulo que llega al país como DONACIÓN termina siendo vendido a 3.000 pesos en Santiago de Cuba.”

La denuncia refleja un patrón que los santiagueros vienen reportando desde hace años: ayudas que no llegan a los más necesitados, intermediarios que convierten la solidaridad en mercancía y autoridades que evitan ofrecer explicaciones claras.

Donaciones que no deberían tener precio

El periodista recuerda que los donantes internacionales envían esos módulos con un propósito humanitario, no para que sean objeto de venta:

“Los donantes del extranjero no envían ayuda para que termine convertida en negocio. La gente de a pie no debería pagar por lo que llega como solidaridad.”

Con un salario promedio en Cuba que ronda los 3.000 pesos, el precio asignado a estos módulos los convierte en bienes inaccesibles para quienes se supone deben recibirlos.

Exigen responsabilidad y respuestas públicas

Mayeta subraya que si algo llega al país como donación, no puede ni debe ser vendido:

“Si es donación, no se VENDE, se entrega. Y si se está vendiendo, alguien tiene que responder.”

La reacción en redes sociales fue inmediata: numerosos usuarios confirmaron que esta práctica no es aislada y que en otros municipios también se comercializan productos donados, muchas veces desde entidades estatales o estructuras vinculadas al gobierno.

Santiago de Cuba, una provincia agotada

Tras los daños causados por el huracán Melissa, Santiago enfrenta escasez extrema de alimentos, apagones prolongados, colapso sanitario y falta de agua. Para cientos de familias, los módulos de donación representan un salvavidas. Verlos vendidos a precios desorbitantes ha aumentado el malestar social.

La denuncia cierra con un mensaje directo a las autoridades:

“Santiago no aguanta más engaños. Que hablen claro. Que expliquen. Que den la cara. El pueblo merece respeto.”

Mientras tanto, continúan apareciendo testimonios que apuntan a un manejo inadecuado de las ayudas internacionales, una situación que agrava la ya crítica realidad de miles de cubanos que dependen de la solidaridad para sobrevivir.