
Díaz-Balart: “Este piloto va a enfrentar años de cárcel en Estados Unidos”
El congresista cubanoamericano Mario Díaz-Balart aseguró en una entrevista con el periodista Mario J. Pentón, para Martí Noticias, que la detención en Estados Unidos del piloto militar cubano Luis Raúl González Pardo Rodríguez —señalado por su participación en el derribo de las avionetas de Hermanos al Rescate— marca un giro en la política hacia Cuba bajo la administración del presidente Donald Trump. El legislador afirmó que el detenido “no será deportado”, sino que enfrentará a la justicia estadounidense por delitos graves, entre ellos mentir a las autoridades federales, lo que podría costarle hasta 15 años de prisión.
Díaz-Balart subrayó que este caso fue ignorado por la administración de Joe Biden. Recordó que en septiembre de 2024 envió una carta a la Casa Blanca alertando sobre la entrada del piloto a territorio estadounidense, sin obtener acción alguna. “La administración de Biden dejó entrar a verdugos y matones del régimen cubano, nicaragüense y venezolano, sabiendo quiénes eran”, afirmó.
Más casos de represores detectados en EE. UU.
El congresista mencionó otros casos de funcionarios cubanos que ingresaron al país sin impedimentos durante la administración anterior. Entre ellos, la jueza Melody González Pedraza, quien condenó a cuatro jóvenes que aún cumplen condena en Cuba, y que finalmente fue deportada junto a su familia. También aludió a la fiscal Rosabel Roca San Pedro, que pidió penas más altas contra manifestantes del 11J y continúa residiendo en Houston, y al secretario del Partido Comunista Manuel Méndez Castellanos, visto en el aeropuerto de Miami “entrando como si nada”.
Pentón preguntó si podrían venir cargos adicionales contra González Pardo Rodríguez, tomando en cuenta los testimonios que lo vinculan directamente con la operación que terminó con el derribo de dos avionetas civiles en 1996 y la muerte de cuatro cubanoamericanos. Díaz-Balart respondió que “es posible que haya más cargos”, ya que el caso está ahora en manos de la Fiscalía Federal.
Inmigración: apoyo a un proceso de revisión, pero rechazo a deportaciones a países autoritarios
Durante la conversación, el periodista abordó la preocupación de la comunidad cubanoamericana ante las detenciones y deportaciones de migrantes que han huido de dictaduras. Díaz-Balart dejó clara su posición: “No se debe devolver a nadie a Cuba, Venezuela o Nicaragua”. Sin embargo, reconoció que la administración Trump está cumpliendo su compromiso de expulsar a quienes ingresaron sin revisión previa.
El congresista afirmó estar trabajando —junto con María Elvira Salazar y Carlos Giménez— en una vía para que los migrantes decentes puedan optar a un proceso de regularización. “No lo hemos logrado todavía, pero seguimos en conversaciones. No nos han cerrado la puerta”, señaló.
Política hemisférica: presión militar y mensaje a Venezuela
Díaz-Balart defendió el despliegue del portaaviones estadounidense frente a las costas venezolanas como parte de una estrategia más amplia contra lo que calificó como “el cartel de los soles”, refiriéndose al aparato militar del régimen de Nicolás Maduro. Aseguró que las opciones para sus líderes se reducen a: huir, terminar en una cárcel estadounidense o enfrentar un ataque selectivo similar al que eliminó al general iraní Qasem Soleimani.
“Estoy convencido de que a Maduro y su clan les queda poco”, afirmó.
Cuba: “La tiranía está más débil que nunca”
El congresista sostuvo que el régimen cubano atraviesa su mayor crisis en seis décadas, debilitado institucionalmente, fracturado internamente y sometido a presiones económicas sin precedentes. Señaló que en varias zonas del país continúan ocurriendo protestas nocturnas, pese a la represión.
También se refirió al caso del exministro de Economía Alejandro Gil, ahora acusado de espionaje: “No se trata de ninguna trama, simplemente querían quitárselo del medio”.
Díaz-Balart pronosticó que Venezuela será la primera dictadura en caer en el hemisferio y que Cuba le seguirá:
“Estoy convencido de que estas tiranías no van a sobrevivir los tres años y pico que le quedan al presidente Trump”.
Un mensaje final: eficacia sobre espectáculo
En respuesta a críticas dentro de la comunidad que reclaman mayor presión pública del bloque de congresistas cubanoamericanos, Díaz-Balart enfatizó que sus esfuerzos se centran en resultados reales, no en declaraciones mediáticas: “La gritería no cambia leyes. Lo que funciona es el trabajo eficaz”.
La entrevista concluyó con un llamado de Pentón a compartir la información y mantenerse atentos a los próximos desarrollos, especialmente en los casos migratorios y en la investigación federal del piloto cubano detenido.







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