Denuncian en Pinar del Río la orden de desechar muestras de sangre de pacientes con síntomas de arbovirosis

Una grave denuncia difundida en Facebook por la activista cubana Tania Tasé, conocida por su perfil Las Taniadas, ha generado alarma dentro y fuera de Cuba. Según la información que asegura haber recibido desde la provincia de Pinar del Río, el personal de laboratorio de todos los policlínicos de la provincia habría sido instruido para desechar las muestras de sangre de pacientes que presentan síntomas compatibles con arbovirosis, como el dengue o el zika.

De acuerdo con el testimonio, la orden fue transmitida “desde muy arriba” y replicada por los directores de los centros de salud, quienes, a su vez, obligan al personal bajo amenaza a cumplirla.

“No quieren decirle a los pacientes que no hay reactivos para analizar las muestras de IGM. Por tanto, les extraen la sangre y les dicen que el resultado estará listo en siete días. Luego, si el paciente está aún vivo después de una semana, recibe un resultado negativo”, escribió Tasé.

La denuncia apunta a una manipulación deliberada de los datos epidemiológicos con el objetivo de ocultar el número real de contagios y fallecimientos en la provincia más occidental del país. Tasé asegura que fuentes locales le han informado sobre muertes múltiples en un mismo vecindario y describe la situación en una funeraria donde, en un solo día, “había 17 cadáveres”, algo que —según uno de los testigos— no se veía ni durante la pandemia de COVID-19.

La activista, residente en Berlín, explica que se ha abstenido de revelar las identidades de sus fuentes “para no poner en riesgo sus vidas”, pero subraya que los profesionales dentro del sistema de salud viven entre el miedo a las represalias y el peso de la conciencia al ser testigos de muertes evitables.

“Están viendo morir personas a diario y también están recibiendo amenazas de represión severa si abren la boca”, advierte.

En el policlínico Pedro Borrás Astorga, ubicado en el municipio del mismo nombre, se habría producido recientemente un cambio de dirección, y tanto la directora saliente como el nuevo responsable habrían participado en la aplicación de estas órdenes. Tasé los describe como parte de una “cadena diabólica que empieza en las más altas esferas del régimen cubano”.

La publicación también cuestiona la negativa del régimen a declarar una emergencia epidemiológica, lo que impediría que organismos internacionales como la Organización Mundial de la Salud (OMS) puedan intervenir y enviar ayuda humanitaria.

“¿Por qué no quiere el régimen declarar emergencia epidemiológica? ¿Por qué cerrar las vías de una ayuda que recibirían de inmediato de la OMS? ¿Por qué tener en sus negras conciencias la muerte de tantos cubanos?”, escribió.

Tania Tasé califica la situación como un “crimen de exterminio” y hace un llamado al personal sanitario cubano a desobedecer las órdenes que ponen en riesgo vidas humanas y a denunciar públicamente lo que está ocurriendo.

Su mensaje concluye con una advertencia contundente:

“Hablen y denuncien a pesar del miedo. Hay niños muriendo, gente joven muriendo, gente sana enfermando de no se sabe qué y muriendo. Niéguense a cumplir esa orden que le cuesta la vida a otros.”

La denuncia de Tasé llega en un momento en que Cuba enfrenta un repunte de enfermedades transmitidas por mosquitos, agravado por la falta de fumigación, la escasez de medicamentos y el colapso sanitario. Sin embargo, las autoridades no han emitido comunicados oficiales sobre brotes en Pinar del Río ni sobre el presunto desecho de muestras.