
Una madre y su hijo sin comer durante dos días: la historia que conmovió a un cubano en La Habana
Una publicación en Facebook del usuario Henrrito Rico ha conmovido a cientos de internautas al relatar un encuentro que refleja el drama cotidiano que viven muchas familias en Cuba. Según su testimonio, mientras regresaba del aeropuerto José Martí, se detuvo en un semáforo donde una mujer y su hijo vendían maní.

El relato comienza con una frase que parte el alma:
“El niño le dijo a la mamá: ‘Mami, tengo hambre.’ Ella le respondió: ‘No hemos vendido nada.’ A lo que él le contestó: ‘Mamá, llevamos un día sin comer ya.’”
Ante la escena, Henrrito decidió detenerse y ofrecerles ayuda. Les invitó a subir a su auto y los llevó a una paladar en el municipio de Boyeros, donde les compró pizzas y comida para llevar, además de entregarles algo de dinero extra.
“Esa mujer no sabía cómo agradecerme, solo me dijo mil gracias por todo. Ya iba a hacer dos días que no comíamos yo y el niño”, escribió el autor del post.
En su publicación, añadió que escribir sobre lo ocurrido le “hacía un nudo en la garganta”, reflexionando sobre el sufrimiento de tantas madres cubanas que, a pesar de sus esfuerzos, no logran alimentar a sus hijos.
“Como duele ver madres luchando y muchas veces no tienen para darles a sus hijos. Ojalá Dios me dé abundancia para poder seguir ayudando a más personas”, concluyó.
La historia se ha viralizado en las redes, generando mensajes de solidaridad y tristeza ante una realidad que golpea cada vez con más fuerza a las familias cubanas, donde la inflación, la escasez de alimentos y la crisis económica han convertido en un lujo algo tan básico como comer todos los días.
En un país donde el régimen asegura que “nadie queda desamparado”, la escena narrada por Henrrito Rico es el retrato más elocuente de una Cuba donde la dignidad se vende al borde de un semáforo.







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