Duannis León Taboada lleva cinco días en huelga de hambre y sed: su vida corre peligro mientras su madre sigue sin poder verlo

La situación del preso político cubano Duannis León Taboada se ha vuelto crítica. Según denunció este miércoles la activista Anamely Ramos González, el joven de 27 años se encuentra plantado desde el viernes y ha entrado ya en su quinto día sin ingerir alimentos, apenas tomando sorbos de agua. Su cuerpo, frágil y menudito, está visiblemente deteriorado y aún no ha recibido atención médica dentro del penal Combinado del Este. A su madre, Jenni Taboada, no se le ha permitido verlo.

La alerta proviene de sus compañeros de celda, quienes han logrado hacer llamadas para advertir del estado alarmante de Duannis. Según relatan, se niega rotundamente a comer y repite con firmeza que lo único que pide es justicia.

“Duannis no va a pasar diez años más de su vida encerrado. Si no lo sueltan, ¡él mismo se liberará!”, escribió Ramos en una publicación difundida en redes sociales, acompañada de una fotografía del saco con alimentos que su madre tenía preparado para llevarle en la próxima visita.

Este joven, que ya había sido golpeado por gritar “Patria y Vida” dentro del penal en 2024, tiene una condición médica de nacimiento: un riñón dilatado, lo que convierte esta huelga en un acto extremo y potencialmente mortal. Su madre, que sufrió un principio de isquemia durante un episodio anterior de represión, se encuentra nuevamente en un estado de angustia permanente.

En su denuncia, Anamely Ramos también alertó sobre el colapso general de la sociedad cubana: “Nuestros presos están muriendo lentamente en las cárceles. Nuestros niños están en la calle vendiendo cosas, nuestros jóvenes perdidos por el químico, nuestros ancianos solos y desamparados. Nadie duerme en Cuba. Nadie sabe qué comerá mañana”.

El Observatorio de Derechos Culturales, que ya había emitido una alarma este lunes, y otros grupos defensores de derechos humanos han exigido acceso inmediato a Duannis León Taboada y han responsabilizado al régimen cubano por cualquier daño irreparable a su integridad física y emocional.

Desde ClickCuba, nos unimos al llamado de alerta y reiteramos la necesidad de solidaridad internacional. La vida de Duannis pende de un hilo. Su protesta, silenciosa pero contundente, clama por justicia en medio de un sistema que continúa reprimiendo a quienes se atreven a alzar la voz.