Liberado el opositor cubano Enrique Mustelier Sosa tras cumplir condena por participar en el 11J

Enrique Mustelier Sosa, opositor cubano nacido en Guantánamo y conocido por su firme postura contra el régimen, fue liberado este jueves 10 de julio tras cumplir una condena de tres años y dos meses de prisión impuesta por su participación en las protestas del 11 de julio de 2021.

La noticia fue dada a conocer por la cuenta en X @PresosCuba, que publicó: “Sale en libertad Enrique Mustelier Sosa. Muchas bendiciones para nuestro hermano Enrique. La Patria os contempla orgullosa. Gracias por tu resistencia y valentía”.

Mustelier Sosa, nacido el 29 de diciembre de 1982, ha vivido desde joven bajo la sombra de la represión. Su padre, Enrique Mustelier Turro, fue condenado a 16 años de cárcel por supuestamente intentar sacar información militar hacia la Base Naval de Guantánamo. En 2013, desapareció misteriosamente en prisión, y desde entonces su hijo ha denunciado públicamente su posible asesinato.

Las amenazas contra Mustelier Sosa comenzaron desde sus primeros años de activismo. En diciembre de 2010 intentó huir del país a través de la Base Naval, pero fue capturado y encarcelado en la prisión provincial de Guantánamo, donde permaneció cinco años. A su salida, lejos de silenciarse, se mantuvo activo en la denuncia de abusos, especialmente en torno al caso de su padre.

En 2021, se unió a las manifestaciones pacíficas del 11J que sacudieron a todo el país. Fue detenido en Guantánamo, y su hermana Katiuska denunció que durante su arresto sufrió una brutal golpiza. En diciembre de ese mismo año fue juzgado junto a otros manifestantes por cargos fabricados como desórdenes públicos y desacato, y sentenciado a tres años y dos meses de prisión.

Su liberación se produce en medio de un contexto de creciente represión, justo cuando se cumplen cuatro años de las protestas del 11J, y decenas de activistas y familiares de presos políticos enfrentan vigilancia, amenazas e impedimentos para movilizarse.

Enrique Mustelier Sosa sale hoy de prisión con una historia marcada por el dolor y la resistencia. Su liberación es recibida con alegría por quienes, dentro y fuera de Cuba, continúan exigiendo libertad, justicia y el respeto a los derechos humanos.