Llamado a Paro Nacional en Cuba: Crece la convocatoria a una huelga de brazos caídos contra la dictadura

Distintas voces opositoras dentro y fuera de Cuba han lanzado una convocatoria a un Paro Nacional del 1 al 30 de julio, como acto de desobediencia civil y protesta contra la dictadura encabezada por Miguel Díaz-Canel. Bajo el lema “Por Cuba. Abajo la dictadura, abajo el PCC. Viva Cuba Libre, Viva la Libertad”, el llamado busca una movilización masiva no violenta, que demuestre el rechazo ciudadano a un régimen que mantiene al país sumido en la crisis.

La iniciativa, promovida por la plataforma “Patria Vida Libertad”, pide unidad a todos los cubanos —tanto en la isla como en el exilio—, e insta a activistas, partidos opositores, influencers, ONG y periodistas a sumarse y a convocar a sus seguidores y familiares.

¿Qué es la huelga de brazos caídos?

La propuesta concreta consiste en una huelga de brazos caídos, es decir, una forma de protesta pacífica en la que los trabajadores se abstienen de realizar sus labores y permanecen inactivos. Esta modalidad no implica manifestaciones callejeras, sino quedarse en casa sin producir, lo que busca colapsar sectores económicos clave del país sin exponerse directamente a la represión violenta.

Objetivos del paro

Según el documento organizativo que circula en redes sociales, el paro tiene tres dimensiones fundamentales:

Políticas: Exigir el fin de la dictadura cubana y la liberación de los presos políticos. Sociales: Medir la voluntad de cambio, fortalecer la confianza ciudadana y enviar una señal clara de rebeldía al régimen y al mundo. Económicas: Paralizar sectores estratégicos como el portuario, energético, turístico, agrícola, minero y servicios públicos (excepto salud y educación), para presionar a las autoridades desde adentro.

Un precedente histórico

Los organizadores recuerdan que Cuba ya vivió una huelga general exitosa en 1933 contra el dictador Gerardo Machado, así como la experiencia de Costa Rica en 1947. Ahora apuestan por repetir ese gesto de resistencia ciudadana para “visualizar la miseria y esclavitud del pueblo cubano” y demostrar que el comunismo en Cuba “no funciona”.

Llamado a la unidad

“Es ahora o no será nunca”, reza la publicación de la convocatoria. El mensaje apela a las emociones familiares y patrióticas de los cubanos: “Por tu familia, por tus hijos, por tus padres, tus primos, tus tíos, tus amigos, tus vecinos, por ti”.

Aunque el régimen mantiene bajo vigilancia a cualquier forma de disidencia interna, el uso de este tipo de huelgas pacíficas se presenta como una vía efectiva y segura para expresar el descontento sin exponerse directamente a arrestos o represión violenta.

La fecha está marcada. El pulso entre la sociedad civil cubana y el poder vuelve a tensarse. Y esta vez, con el silencio como arma.