Ciudadanía y Libertad presenta en Freedom House un informe clave sobre la represión del derecho de asociación en Cuba

La organización Ciudadanía y Libertad presentó este martes en la sede de Freedom House el informe “El derecho de asociación en Cuba: arquitectura legal de la represión”, una investigación que desentraña el entramado jurídico que el régimen cubano utiliza para impedir la libre organización ciudadana y mantener el control absoluto sobre el espacio cívico.

El informe, publicado en mayo y elaborado por la activista y analista Carolina Barrero junto a la abogada Maylin Fernández, expone con precisión cómo la legislación cubana no solo restringe sino que criminaliza toda forma de asociación autónoma que no esté subordinada al Estado y al Partido Comunista. A través de normas constitucionales, resoluciones administrativas y artículos penales, el régimen configura un sistema legal cerrado que convierte en delito la disidencia organizada.

Durante la presentación, se compartió un documento que ilustra esta realidad: la resolución oficial que en 2012 denegó la inscripción legal de la Asociación Jurídica Cubana, firmada por Miriam Martha García Mariño, directora de la Dirección de Asociaciones del Ministerio de Justicia. En ella se invoca el artículo 8, inciso d) de la Ley 54 (Ley de Asociaciones), argumentando que ya existía una organización con “fines similares” —la oficialista Unión Nacional de Juristas de Cuba—, razón por la cual se negaba el registro. El documento, facilitado por el abogado Julio Ferrer, constituye una evidencia contundente de la exclusión legalizada de la sociedad civil independiente en Cuba.

En la sala estuvieron presentes destacados activistas como Yoaxis Marcheco Suárez, Mario Félix Lleonart, Raudel García Bringas y Saily González Velázquez, cuyas experiencias personales reflejan los riesgos y consecuencias de ejercer el derecho de asociación por fuera de las estructuras impuestas por el poder. Su presencia añadió una dimensión humana y testimonial al análisis jurídico presentado.

En palabras de los organizadores, el evento tuvo como objetivo no solo denunciar el estado actual de represión legal en Cuba, sino también alertar sobre posibles reformas cosméticas que el régimen podría anunciar próximamente bajo el nombre de “Ley de Formas Asociativas”, prevista para julio. Ciudadanía y Libertad advirtió que este proceso puede ser un intento del gobierno de maquillar el control estatal bajo el disfraz de legalidad y apertura, y reiteró su compromiso de fiscalizar críticamente cualquier medida en ese sentido.

“En medio de tantas urgencias globales, agradecemos profundamente a quienes nos acompañaron esta mañana lluviosa en Washington para hablar de la libertad en Cuba”, expresó el equipo de Ciudadanía y Libertad, que también agradeció especialmente a Freedom House por su respaldo constante a las causas de la sociedad civil cubana.

El informe completo se seguirá difundiendo entre actores internacionales, ONGs, gobiernos democráticos y miembros de la diáspora cubana comprometidos con el cambio real en la isla.

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