“Me están matando de hambre”: Fernando Bárcena denuncia torturas y condiciones inhumanas en prisión de Granma

Desde la prisión provincial de Granma, conocida como “Las Mangas”, el preso político manifestante del 11J, Fernando Michel Bárcena Mompié ha enviado un estremecedor testimonio de voz a la redacción de ClickCuba. En el mensaje, Bárcena relata haber sido sometido recientemente a torturas físicas y psicológicas en una celda de castigo en Veguita I, donde permaneció recluido durante 12 días en condiciones infrahumanas.

“Hola Guerrera, saludo, Iliana”, comienza diciendo Bárcena, al dirigirse a la periodista y activista Iliana Hernández. “Después de la última vez que hablamos, el pasado 7 de abril creo que fue, me estrujaron un poco y me encerraron en una celda de castigo por 12 días”, revela en el mensaje de audio.

El opositor, conocido por sus denuncias contra el régimen cubano, describe aquella celda como “un pedacito de infierno”, más severa que otras prisiones por las que ha pasado. Sufrió una rápida degeneración de la vista, dolores de cabeza persistentes y una pérdida alarmante de peso. “Mi estatura es de 1.60 centímetros y mi peso actual de 41 kilogramos”, confesó con voz debilitada.

Además de la agresión física y el confinamiento, Bárcena denuncia el robo de pertenencias personales. Le fueron retirados su diario, documentos personales, apuntes de inglés y, lo que más le ha dolido, unos dibujos que le enviaron sus hijas pequeñas con motivo del Día de los Padres. “Eso me está doliendo aún”, lamentó.

El activista responsabiliza directamente al teniente coronel Javier, jefe de la prisión de Veguita I, a quien acusa de estar detrás de esta represión tras una denuncia anterior que Bárcena hizo llegar fuera de los muros carcelarios. “Pude ver en su rostro el miedo a la verdad emergiendo y las ganas de acabar con mi vida”, afirmó.

La situación en Las Mangas no es mejor. Bárcena denuncia que la alimentación es “prácticamente nula” y que la doctora del piso “responde claramente a los intereses de los uniformados”. Además, su tarjeta telefónica ha sido bloqueada, lo que limita aún más sus posibilidades de comunicación.

La dictadura, advierte, “está aprovechando el abandono y la vulnerabilidad que estamos viviendo los presos políticos en estos últimos meses”. “Créeme, me están matando de hambre”, concluye.

Desde ClickCuba exigimos el cese inmediato de los tratos crueles e inhumanos contra Fernando Bárcena y todos los presos políticos en Cuba. Reiteramos nuestra denuncia al mundo: las cárceles del régimen cubano siguen siendo centros de tortura encubiertos, donde se intenta silenciar a quienes alzan su voz por la libertad.