Régimen cubano detiene a activistas que suplicaban una visa humanitaria para el niño Damir Ortiz

El régimen cubano ha respondido con represión a un acto de desesperación ciudadana. Este miércoles 26 de febrero de 2025, las activistas Yamilka Lafita (Lara Crofs en redes sociales) y Daniela Peral fueron detenidas tras intentar suplicar frente a la Embajada de Estados Unidos en La Habana la tramitación urgente de una visa humanitaria para el niño Damir Ortiz, quien se encuentra en estado crítico.

La represión no se hizo esperar. Desde temprano, agentes de la Seguridad del Estado se desplegaron en las inmediaciones de la sede diplomática y comenzaron a hostigar a quienes intentaban acercarse. La protesta pacífica fue inmediatamente sofocada con la detención de sus principales organizadoras.

Un acto de súplica, no de exigencia

Las activistas no estaban exigiendo una respuesta de la embajada estadounidense, pues es el propio régimen cubano el responsable de garantizar la vida y el bienestar de sus ciudadanos. Solo querían ser escuchadas y pedir, con la urgencia que requiere el caso, una oportunidad para Damir.

Sin embargo, el régimen cubano impidió cualquier intento de solidaridad, dejando claro que no tolera la movilización de la sociedad civil, ni siquiera cuando se trata de salvar la vida de un niño gravemente enfermo.

La activista Amelia Calzadilla denunció la detención a través de sus redes sociales, condenando la represión con un mensaje contundente:

“Abusadores, permitan que la sociedad civil haga el trabajo que ustedes mismos no hacen. Liberen a Lara Crofs.”

Su publicación ha sido ampliamente compartida y ha generado un fuerte rechazo hacia el régimen, que en lugar de ayudar, optó por silenciar a quienes buscan soluciones.

Sitiados para impedir participación

No solo detuvieron a Lafita y Peral, sino que otros activistas han sido sitiados en sus viviendas para evitar que se sumen a la movilización.

Reportes en redes sociales indican que la Seguridad del Estado intervino teléfonos y desplegó agentes frente a los domicilios de opositores, una estrategia común para evitar cualquier expresión de solidaridad con causas que el régimen considera incómodas.

Silencio, represión y abandono

Mientras el caso de Damir sigue en una incertidumbre angustiante, el régimen reafirma su desprecio por la vida y la voluntad de la sociedad civil de actuar.

En Cuba, no solo se persigue a quienes critican al régimen, sino también a quienes suplican por una causa humanitaria. La detención de Yamilka Lafita y Daniela Peral es una nueva muestra de la brutalidad del sistema, que prefiere reprimir antes que permitir que los cubanos ayuden a los suyos.