Damir: Amaneció ciego mientras espera la cita en la embajada para una visa humanitaria

La situación del pequeño Damir se agrava día a día. Este miércoles, su madre, Eliannis Ramírez Báez, informó que su hijo, quien hasta ayer podía ver con dificultad, amaneció completamente ciego. Esta nueva complicación ocurre tan solo un día antes de su cita en la Embajada de los Estados Unidos en La Habana, donde solicitará una visa humanitaria que les permita buscar atención médica en el extranjero.

Un deterioro acelerado

Damir ha estado enfrentando una serie de complicaciones graves en su salud, incluyendo tumores en la columna, parálisis en las piernas y celulitis en un ojo. Sin embargo, la pérdida total de la vista representa un nuevo golpe para este niño y su familia. Su madre, visiblemente devastada, denuncia la falta de atención y recursos en el sistema de salud cubano, que hasta ahora no ha proporcionado el tratamiento necesario para detener este deterioro progresivo.

En la imagen compartida por su madre, el estado crítico de los ojos de Damir es evidente. Este es un reflejo de la desatención que ha enfrentado durante años y de la negligencia de un sistema de salud que se niega incluso a emitir la carta requerida para buscar ayuda internacional.

La cita en la embajada: una última esperanza

La cita programada para el 6 de febrero en la Embajada de EE. UU. es vista por la familia como una última esperanza para salvar la vida de Damir. Eliannis planea presentar una carta médica de 2016 que detalla su condición, ya que el Hospital Pediátrico Juan Manuel Márquez se ha negado a emitir un documento actualizado que certifique la falta de recursos en el país.

Un llamado a la solidaridad

El caso de Damir ha movilizado a la comunidad cubana, tanto dentro como fuera de la isla, quienes han utilizado el hashtag #SOSDamir para denunciar su situación y exigir acción inmediata. La madre de Damir pide apoyo internacional y visibilidad para el caso, con la esperanza de que las autoridades consulares reconozcan la urgencia y emitan la visa humanitaria que su hijo necesita desesperadamente.

Damir no puede esperar más. Su vida y calidad de vida dependen de decisiones que deben tomarse con urgencia. La comunidad internacional y las organizaciones de derechos humanos deben redoblar sus esfuerzos para garantizar que este niño reciba la atención médica que el sistema de salud cubano le ha negado durante años.