Orlando Gutiérrez Boronat: “Defiendo mi honor ante las calumnias del régimen castrista y las divisiones en el exilio”

El reconocido activista cubano y profesor universitario Orlando Gutiérrez Boronat se enfrentó una vez más a ataques directos del régimen cubano, que lo acusó a través de su vocero Randy Alonso de ser “el retrato perfecto de un capo de la mafia de Miami”. En una entrevista exclusiva con Juan Manuel Cao en el programa “A Fondo”, Gutiérrez Boronat desmintió categóricamente estas acusaciones, destacando la transparencia de su labor al frente del Directorio Democrático Cubano y la importancia de mantener la unidad en el exilio.

Transparencia y auditorías: 30 años sin objeciones

Durante la entrevista, Gutiérrez Boronat se enfatizó en que su organización opera con total transparencia, sometida a auditorías rigurosas tanto a nivel interno como por parte de organismos federales. “En 30 años de trabajo, el Directorio no ha tenido un solo problema con ninguna auditoría. Todo se ha gastado en proyectos que apoyan la libertad de Cuba, desde el fortalecimiento de la disidencia interna hasta la transmisión de información al pueblo cubano”, afirmó.

El activista también respondió a las publicaciones de medios castristas que divulgaron cifras de financiamiento de la USAID y el Departamento de Estado hacia su organización, asegurando que esta información es pública y puede ser solicitada legalmente. “La diferencia es que nosotros trabajamos de manera transparente, mientras el régimen castrista invierte millones en campañas de difamación que jamás hacen públicas”, señaló.

El impacto de las divisiones en el exilio

La controversia se intensifica con las recientes declaraciones del ex preso político Armando Valladares , quien cuestionó la administración de los fondos del Directorio y acusó a Gutiérrez Boronat de no utilizarlos adecuadamente. Estas acusaciones, provenientes de una figura prominente del presidio político cubano, generaron desconcierto en la comunidad exiliada.

“Es una canallada lanzar estas mentiras que dañan nuestra reputación y nuestra causa. No hay ningún fundamento en esas afirmaciones”, respondió Gutiérrez Boronat, aclarando que apenas ha tenido contacto con Valladares en el pasado. Además, lamentó que estas disputas internas sean utilizadas por el régimen cubano para debilitar la lucha por la libertad de Cuba.

Llamado a la unidad y al enfoque estratégico

El activista aprovechó la oportunidad de reiterar su llamado a la unidad dentro del exilio cubano. “No podemos caer en las divisiones que el régimen fomenta. Su estrategia es sembrar discordia entre los líderes del exilio, y no debemos permitirlo”, afirmó, citando el caso de Valladares como un ejemplo de cómo estas disputas pueden ser manipuladas para desviar la atención de la lucha principal.

También destacó que su organización sigue comprometida con los principios históricos del exilio, que incluyen tiernos puentes con aquellos elementos dentro del régimen que no tengan las manos manchadas de sangre, para construir una transición democrática en Cuba. “Es un llamado que han hecho líderes históricos como Jorge Mas Canosa y Tony Barona. La reconciliación no es traición; es una estrategia para el cambio”, sostuvo.

Un ataque constante y sistemático.

Gutiérrez Boronat cerró la entrevista destacando que este no es un ataque aislado. “Llevo décadas enfrentándome a las agresiones del régimen: amenazas de muerte, difamaciones en la prensa oficialista, y ahora, estas calumnias provenientes de figuras del exilio. Pero nada nos desviará de nuestra misión de lograr la libertad de Cuba”, concluyó.

Por su parte, Juan Manuel Cao reiteró la invitación a Valladares para presentar su versión de los hechos, abogando por el diálogo sereno y constructivo dentro de la comunidad exiliada. Sin embargo, el periodista enfatizó que las polémicas internas solo benefician al régimen castrista y debilitan la causa común.

Con estos acontecimientos, queda en evidencia la complejidad de mantener la cohesión en la lucha contra el régimen cubano, un desafío que requiere compromiso, unidad y un enfoque claro en el objetivo de alcanzar la libertad de Cuba.