Díaz-Canel en Venezuela: Apoyo solitario a Maduro en medio de crisis política

En un contexto de creciente aislamiento internacional, el presidente designado de Cuba, Miguel Díaz-Canel, arribó hoy a Venezuela para respaldar a Nicolás Maduro, quien pretende juramentarse para un nuevo mandato a pesar de su derrota en las elecciones del pasado 28 de julio. Díaz-Canel es el único jefe de Estado presente en la ceremonia, mientras que otros líderes mundiales han optado por enviar delegaciones de menor rango o no asistir en absoluto.

Las elecciones del 28 de julio otorgaron una clara victoria al opositor Edmundo González Urrutia, reconocido por diversos países y organismos internacionales como el legítimo ganador. Sin embargo, Maduro ha rechazado estos resultados y, sin presentar las actas oficiales, se dispone a asumir la presidencia nuevamente, lo que ha generado acusaciones de fraude y ha intensificado la crisis política en el país.

La comunidad internacional ha reaccionado con firmeza. Estados Unidos, a través del secretario de Estado Antony Blinken, ha manifestado que existen “pruebas abrumadoras” de que González Urrutia fue el vencedor de los comicios. Asimismo, la Unión Europea ha expresado que, sin la publicación de las actas oficiales, los resultados no pueden ser reconocidos. Países como Canadá también han reconocido a González Urrutia como presidente electo.

La situación interna en Venezuela es tensa. En las horas previas a la juramentación de Maduro, se han registrado detenciones de activistas, opositores y periodistas. María Corina Machado, líder opositora, fue arrestada brevemente durante una protesta en Caracas. Por su parte, González Urrutia, actualmente en el exilio, ha expresado su intención de regresar al país para asumir el cargo que, según los resultados electorales, le corresponde.

La presencia de Díaz-Canel en la ceremonia de Maduro subraya la estrecha relación entre los regímenes de Cuba y Venezuela, ambos enfrentando sanciones y críticas por sus prácticas autoritarias. No obstante, la ausencia de otros líderes regionales e internacionales destaca el creciente aislamiento de Maduro en la escena global.

Mientras tanto, el pueblo venezolano continúa enfrentando una profunda crisis económica y humanitaria, agravada por la inestabilidad política. La comunidad internacional sigue de cerca los acontecimientos, instando al respeto de la voluntad popular expresada en las urnas y al restablecimiento de la democracia en el país sudamericano.