Ariel Ruiz Urquiola: «La justicia internacional no está diseñada para las víctimas del régimen cubano»

El biólogo cubano Ariel Ruiz Urquiola, reconocido activista por los derechos humanos y defensor de la justicia para las víctimas de la dictadura cubana, ha compartido un profundo y desgarrador mensaje a través de sus redes sociales. Desde Suiza, donde realiza un posdoctorado en Ciencias Biológicas, Ruiz Urquiola reflexionó sobre su lucha incansable contra el régimen cubano y las barreras legales internacionales que, según él, perpetúan la impunidad de los crímenes de lesa humanidad cometidos por la dictadura.

En su declaración, Ruiz Urquiola detalló los múltiples esfuerzos legales y denuncias presentadas en diversas instancias internacionales, incluyendo Naciones Unidas, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y la Corte Penal Internacional (CPI). A pesar de contar con un dictamen favorable del Grupo de Trabajo sobre Detenciones Arbitrarias de la ONU, que declaró arbitraria su prisión en Cuba, y el reconocimiento de Amnistía Internacional como prisionero de conciencia, el biólogo asegura que estas acciones no han logrado justicia para él ni para otros afectados.

Crímenes documentados y barreras legales

Ruiz Urquiola denunció haber sido víctima de torturas médicas, incluyendo la presunta inoculación de una cepa de VIH por parte de personal médico cubano. Asimismo, señaló que su hermana fue sometida a tratamientos médicos placebo con el objetivo de deteriorar su salud. Estas prácticas, calificadas por él como crímenes de lesa humanidad, no han podido ser procesadas debido a que Cuba no es signataria de tratados internacionales clave en materia de derechos humanos.

«El sistema legal internacional no está diseñado para proteger a individuos en situaciones como la nuestra», lamentó el biólogo, aludiendo a la necesidad de que existan cientos o miles de víctimas para que se active la jurisdicción universal en casos de crímenes de lesa humanidad. Según él, esta barrera técnica imposibilita cualquier acción legal efectiva contra el régimen cubano.

Un llamado a la realidad y la unidad

Ruiz Urquiola declaró con amargura su «derrota moral y legal» tras años de lucha, instando a otros cubanos a reconocer la cruda realidad de la falta de mecanismos legales efectivos contra el régimen. «No tenemos otro mecanismo de lucha que no sea nuestro propio cuerpo, nuestra propia entidad», expresó, subrayando que los organismos internacionales no ofrecen soluciones prácticas para las víctimas de la dictadura.

El biólogo también hizo un llamado a la cohesión entre los cubanos, no para buscar poder político, sino para acabar con las vidas de quienes considera responsables de la destrucción de la nación. Aunque sus palabras generaron controversia, reflejan la desesperación y frustración de aquellos que han sido víctimas directas de la represión.

Impunidad y complicidad internacional

Ruiz Urquiola responsabilizó al régimen de Miguel Díaz-Canel de los crímenes cometidos y denunció la complicidad de otras dictaduras, como las de Rusia y China, así como la indiferencia de gobiernos democráticos que negocian con el régimen cubano. Según él, esta dinámica refuerza la impunidad y perpetúa la represión contra los ciudadanos cubanos.

«Somos tan animales como los que se depredan unos a otros, pero con la diferencia de que somos conscientes de esa depredación», expresó con crudeza, haciendo una comparación con la lucha por la supervivencia en la naturaleza.

Un mensaje para el futuro

El mensaje de Ariel Ruiz Urquiola es un testimonio desgarrador de la lucha por la justicia en contextos de represión y dictadura. Aunque reconoce la falta de avances en su caso, su denuncia pone de relieve la necesidad de reformas en los sistemas internacionales de derechos humanos y justicia penal para proteger a las víctimas individuales de crímenes de lesa humanidad.

«Quizás es momento de aprender a vivir con una derrota, pero también de pensar en las acciones que nos quedan», concluyó, dejando abierta la reflexión sobre el camino que deben tomar los cubanos y las víctimas de regímenes autoritarios en su lucha por la libertad y la justicia.