
España admite que la deuda de 2.000 millones de euros de Cuba es «un problema de difícil solución»
El Gobierno de España ha reconocido públicamente que será muy complicado recuperar la deuda de aproximadamente 2.000 millones de euros que Cuba mantiene con el país. Durante una comparecencia en el Congreso, el secretario de Estado de Economía y Apoyo a la Empresa, Israel Arroyo, explicó que este problema tiene raíces históricas, remontándose a los años 80 y 90, cuando se otorgaron créditos a través del antiguo Fondo de Ayuda al Desarrollo (FAD).
«Es un problema de difícil solución mientras Cuba no pueda pagar, porque ahora misma la situación es la que es», señaló Arroyo, reflejando la preocupación del Gobierno español ante la incapacidad del régimen cubano para cumplir sus compromisos financieros.
Renegociaciones sin éxito
A lo largo de las últimas décadas, España ha intentado resolver esta situación a través de múltiples renegociaciones y reestructuraciones de la deuda. En 2015, como parte de un acuerdo con el Club de París, Cuba logró la condonación de 8.500 millones de dólares de los 11.100 millones que adeudaba desde 1986. Posteriormente, se renegociaron los términos con cada acreedor de manera individual, incluyendo a España.
En ese contexto, bajo el Gobierno de Mariano Rajoy (PP), Madrid y La Habana acordaron ampliar los plazos de pago y aplicar una quita. Más tarde, en 2021, con Pedro Sánchez (PSOE) al frente del Ejecutivo, se firmó un nuevo acuerdo de reestructuración que incluía otra reprogramación de la deuda. Sin embargo, a pesar de estos esfuerzos, la situación no ha mejorado.
Deuda acumulada
Israel Arroyo explicó que el monto total adeudado incluye diversos conceptos: deuda soberana, privada y compromisos con organismos multilaterales. A esto se suma la profunda crisis económica que atraviesa Cuba, caracterizada por una inflación descontrolada, la escasez crónica de alimentos y medicamentos, y una situación electroenergética cada vez más precaria.
Según datos oficiales de la Oficina Nacional de Estadísticas e Información (ONEI), la deuda externa de Cuba asciende a 18.284 millones de dólares, aunque expertos advierten que esta cifra podría ser mucho mayor, dado el hermetismo del régimen en relación a sus finanzas.
Impacto internacional
El caso de la deuda cubana no solo afecta a España. Este mes, el antiguo Banco Central de Cuba perdió un intento por desestimar una demanda en Londres, presentación por un acreedor que reclamaba aproximadamente 70 millones de euros en préstamos impagos. Este fallo podría abrir la puerta a más litigios internacionales contra el régimen, agravando aún más su ya precaria situación económica.
Una economía descontrolada
La incapacidad de Cuba para pagar sus deudas es un reflejo de décadas de mala gestión económica por parte del régimen. Aunque el gobierno cubano insiste en culpar al embargo estadounidense por sus problemas, expertos señalan que la raíz de la crisis está en el modelo económico centralizado y en la corrupción generalizada que ha desangrado los recursos del país.
Para España, el desafío ahora es decidir cómo abordar esta deuda impaga, que no solo afecta a las finanzas públicas, sino también a las empresas españolas que operan en Cuba, muchas de las cuales enfrentan crecientes dificultades debido a la falta de liquidez y garantías jurídicas. en la isla.
El reconocimiento del problema por parte de Israel Arroyo marca un momento clave en las relaciones bilaterales entre ambos países, dejando en evidencia que, mientras el régimen cubano no implemente reformas estructurales, la deuda continuará siendo un problema sin solución.







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