
Horror en Minas: Aliesky Martínez Ferrer, prófugo y acusado de atroz asesinato, aterroriza a la comunidad
La localidad de Minas, en la provincia de Camagüey, vive horas de terror y consternación tras los crímenes perpetrados por Aliesky Martínez Ferrer, un hombre prófugo de la justicia y entrenado por las Tropas Especiales cubanas. En la mañana de ayer, Martínez Ferrer cometió un atroz asesinato al acabar con la vida de su propio hijo, un niño de apenas cinco años, en circunstancias que las autoridades aún investigan, pero que según testigos locales, apuntan a un acto deliberado y premeditado. .
La tragedia no terminó ahí. Martínez Ferrer también agredió brutalmente a una mujer embarazada, a quien golpeó salvajemente, violó y despojó de su teléfono móvil antes de escapar nuevamente. En un desgarrador giro de los acontecimientos, fuentes cercanas informaron que la víctima perdió al bebé que esperaba y se encuentra en estado grave en un hospital local. La comunidad está devastada por la magnitud de la violencia ejercida contra esta joven mujer, quien ahora lucha por su vida.
Un prófugo peligroso y entrenamiento
Aliesky Martínez Ferrer cumplió una sanción de cuatro años en un correccional conocido como «granja abierta», de donde se fugó tras propinar una golpiza a otro interno que casi le costó la vida. Las autoridades describen al prófugo como un individuo altamente peligroso debido a su formación militar en las Tropas Especiales cubanas, lo que le otorga habilidades de combate que complican aún más su captura.
El despliegue policial en Minas y sus alrededores es masivo. Además de las fuerzas regulares, se han movilizado efectivos de las Tropas Especiales para dar con el desfile de Martínez Ferrer, quien, según testimonios, estaría armado y dispuesto a todo. La población vive con temor ante la posibilidad de que vuelva a actuar de forma violenta mientras sigue en libertad.
Protección a la familia de la víctima
En un esfuerzo por prevenir más tragedias, las autoridades han puesto bajo custodia a la madre y la abuela del niño asesinado, quienes temen por sus vidas debido al historial violento de Martínez Ferrer. La decisión responde a la necesidad de proteger a quienes podrían ser objetivos de represalias o nuevos actos de violencia por parte del fugitivo.
Exigencia de justicia y conmoción colectiva
La noticia ha generado indignación en Minas y en todo el país. Los residentes exigen que se haga justicia y que caiga sobre Martínez Ferrer todo el peso de la ley, clamando por la pena máxima para un hombre cuya crueldad ha dejado una profunda herida en la comunidad. «Esto no puede quedar impune. Minas no descansará hasta que se haga justicia», declaró uno de los vecinos.
El caso ha encendido el debate sobre la seguridad en los centros penitenciarios cubanos y la efectividad de las medidas para evitar fugas de individuos peligrosos. Aliesky Martínez Ferrer representa un desafío no solo para las fuerzas del orden, sino también para un sistema que muchos consideran debilitado en su capacidad para controlar a reclusos de alto riesgo.
La comunidad exige respuestas
Minas permanece en estado de alerta mientras continúa la búsqueda. La población, aún conmocionada, se une en oración y solidaridad con las familias afectadas, exigiendo respuestas claras y contundentes de las autoridades. Este caso, marcado por una violencia sin precedentes, será registrado como uno de los episodios más oscuros en la historia reciente de la localidad.
Por el momento, la comunidad guarda noticias sobre la captura de Martínez Ferrer, confiando en que la justicia prevalecerá frente a la atrocidad cometida.







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