
El subsecretario de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental de Estados Unidos, Brian A. Nichols, expresó su indignación ante los informes que señalan que el líder opositor cubano José Daniel Ferrer fue golpeado en prisión y trasladado a otro centro de detención. A través de un mensaje en sus redes sociales, Nichols instó al régimen cubano a garantizar el acceso inmediato de Ferrer a su familia y a liberarlo junto con los casi 1,000 presos políticos que permanecen injustamente detenidos en la isla.
“Indignados por los informes de que José Daniel Ferrer fue golpeado en prisión y trasladado a otro centro de detención, hacemos un llamado al gobierno cubano para que proporcione acceso inmediato a su familia y lo libere a él y a los casi 1,000 presos políticos detenidos injustamente en Cuba”, declaró Nichols.
Escalada de la represión en Cuba
La situación de Ferrer, líder de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), se ha convertido en un símbolo de la represión sistemática contra quienes se oponen al régimen cubano. Organizaciones internacionales de derechos humanos han denunciado reiteradamente las condiciones inhumanas a las que Ferrer ha sido sometido, incluyendo aislamiento prolongado, maltratos físicos y restricciones severas de comunicación con su familia.
El caso de Ferrer no es aislado. Según cifras recopiladas por organizaciones independientes, en Cuba existen alrededor de 1,000 presos políticos, muchos de los cuales enfrentan condiciones similares. Las denuncias apuntan a un incremento de la represión desde las protestas del 11 de julio de 2021, cuando miles de cubanos salieron a las calles exigiendo libertad y mejores condiciones de vida.
Reacciones internacionales
La declaración de Nichols refleja la presión internacional que enfrenta el régimen de Miguel Díaz-Canel. Gobiernos y organizaciones han pedido la liberación inmediata de todos los presos políticos y el respeto a los derechos humanos en la isla. Sin embargo, hasta la fecha, las autoridades cubanas han desestimado estas demandas, alegando que se trata de injerencias extranjeras.
El llamado del gobierno estadounidense se suma a una serie de iniciativas que buscan visibilizar la grave situación de derechos humanos en Cuba. Nichols subrayó que el acceso de Ferrer a su familia y la atención a los reportes de abuso son prioridades inmediatas, mientras continúa el reclamo por la liberación de todos los detenidos.
El papel de la comunidad internacional
Activistas cubanos han reiterado la importancia de la presión internacional para enfrentar la represión en la isla. En este contexto, el mensaje de Nichols se convierte en un respaldo crucial para las familias de los presos políticos y para los opositores que, a pesar de las adversidades, siguen luchando por un cambio democrático en Cuba.
El gobierno cubano no ha emitido hasta el momento una respuesta oficial a estas acusaciones. Entretanto, la situación de José Daniel Ferrer y de cientos de presos políticos sigue siendo motivo de preocupación y movilización para quienes defienden los derechos humanos dentro y fuera de la isla.







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