Madrid se convirtió en un punto de encuentro para los cubanos exiliados y residentes que tuvieron la oportunidad de compartir un momento especial con Angélica Garrido, destacada defensora de los derechos humanos y símbolo de resistencia frente al régimen cubano. Durante su estancia en la capital española, Garrido se reunió con varios compatriotas, agradeciendo el apoyo constante y la fuerza que han demostrado en la lucha por su libertad y la de su hermana, María Cristina Garrido, ambas activistas perseguidas por el gobierno de La Habana. .

En un emotivo mensaje, Garrido instó a los presentes a mantenerse unidos, subrayando la importancia de la cohesión en la lucha por la libertad y los derechos humanos en Cuba. “Estar unidos nos hace fuertes. Es la única manera de lograr cambios reales”, expresó. Su llamado resonó profundamente entre los asistentes, quienes valoraron no solo su valentía, sino también su determinación para seguir luchando desde el exilio.

Aunque Angélica no pudo reunirse con todos los cubanos que le enviaron mensajes de solidaridad, dejó un mensaje de agradecimiento para quienes la apoyan desde la distancia. «Quisiera conocerles y abrazarles a todos, pero les dejo este mensaje de corazón: la libertad de Cuba depende de cada uno de nosotros. No dejemos de luchar juntos». Estas palabras fueron recibidas con aplausos y renovado compromiso por parte de los presentes.

Garrido también aprovechó su paso por Madrid para participar en encuentros con organizaciones de derechos humanos y compartir su experiencia como activista. Su testimonio es un recordatorio constante de los retos que enfrentan quienes alzan la voz contra el régimen cubano, pero también una fuente de inspiración para quienes siguen trabajando por una Cuba libre desde diferentes partes del mundo.

La visita de Angélica Garrido a Madrid reafirma la importancia de la solidaridad internacional en la causa por la democracia en Cuba. Su mensaje de unidad y esperanza continúa siendo un faro para quienes sueñan con un futuro mejor para la isla.