En Villa Clara, la situación para los artistas se ha vuelto cada vez más insostenible. Los cantantes y músicos profesionales de la ciudad enfrentan una falta de oportunidades laborales debido a la crisis energética y la falta de un presupuesto constante para la contratación artística. Esto ha llevado a muchos a enfrentar una realidad económica desesperada.

“Llevamos meses sin trabajo estable debido a la inestabilidad eléctrica y a la falta de recursos económicos para eventos o contrataciones. La situación se ha vuelto crítica, y si esto no se revierte pronto, los artistas de la localidad acabaremos siendo considerados casos sociales”, compartió un cantante local, que prefirió no revelar su identidad por temor a represalias.

La reciente crisis energética ha agravado la problemática. En días pasados, ante la falta de electricidad, se ordenó detener toda labor no imprescindible, enviando a los trabajadores a casa con una parte de su salario. Sin embargo, para los artistas, la situación es aún más grave. “Nadie se ha dado cuenta de que llevamos mucho tiempo viendo afectadas nuestras labores por el problema eléctrico nacional. No hay protección para nosotros. ¿Cómo podremos vivir honestamente de nuestro trabajo si, cada vez que gestionamos algo, la respuesta es que no hay presupuesto o no tenemos electricidad a esa hora?”, añadió otro afectado.

Los artistas han intentado organizarse para crear una sección sindical, pero los esfuerzos han sido en vano. La falta de respuesta por parte de las autoridades ha sumido a la comunidad artística en una sensación de abandono. “No tenemos trabajo y, para colmo, siempre nos llaman para que ayudemos gratuitamente en eventos, apelando a cualquier tipo de relación o amistad, sin tener en cuenta que también necesitamos poner comida en la mesa para nuestras familias”, denunció otro músico.

En un escenario donde la música grabada reemplaza al arte en vivo y se valora más la reproducción de canciones que el esfuerzo de los artistas en directo, los músicos locales se encuentran al borde de abandonar sus carreras. Muchos, tras años de formación y dedicación, están contemplando dejar su pasión por la música y recurrir a trabajos informales, en ventas o servicios, para sobrevivir.

“Es una pena tener que dejar toda nuestra instrucción en una gaveta para vender en cualquier merendero, pero lo que no podemos permitir es que nuestros hijos pasen hambre”, concluyó uno de los artistas afectados.

La falta de oportunidades laborales, sumada a la precariedad de la situación energética, ha convertido a los artistas de Villa Clara en un sector especialmente vulnerable. La comunidad artística se enfrenta a la disyuntiva de luchar por su vocación o abandonar el arte para buscar otras alternativas. Sin soluciones inmediatas, el futuro de la cultura en esta región parece estar en riesgo.