En una declaración tras el juicio que enfrentó hoy, el ex preso político cubano Alejandro Garlobo expresó su frustración y denunció irregularidades en su proceso judicial. Garlobo, quien estuvo 9 meses detenido, 40 días de ellos en Villa Marista, se enfrentó a nuevas acusaciones que, según él, no proceden y carecen de fundamento. En un audio que compartió después de la audiencia, detalló las inconsistencias del caso y la falta de pruebas por parte de la fiscalía.

Originalmente acusado de «otros actos contra la seguridad del Estado», explicó que el fiscal modificó la imputación a «revelación de secretos concernientes a la seguridad del Estado», un delito que conlleva penas de 4 a 10 años de prisión. Sin embargo, el acusado sostiene que esta nueva acusación no tiene ninguna relación con su situación. «No tienen ni la mínima prueba», afirmó categóricamente, subrayando que ningún testigo se presentó durante el juicio, ni siquiera aquellos vinculados a su caso, como el subteniente de Villa Marista, quien, según declaró, estaba enfermo y no asistió.

El ex preso político también explicó que su abogada desmanteló las acusaciones del fiscal durante la audiencia. «La abogada arremetió contra el fiscal porque dijo que esto es una chapucería total», relató. Según la defensa, la nueva acusación carece de base y la figura delictiva en cuestión está más dirigida a militares, no a civiles. «Yo no soy militar, soy un cubano civil de a pie, pobre», afirmó, desestimando los cargos que considera una maniobra para prolongar su proceso judicial.

El juicio quedó en concurso para sentencia, lo que significa que la decisión final aún está pendiente. Sin embargo, el ex detenido ya se prepara para apelar en caso de que la sentencia sea desfavorable. «Estamos listos para hacer todo, no se va a dejar nada de la mano», aseguró, mencionando la posibilidad de llevar el caso a casación.

En su declaración, también criticó la inconsistencia de acusarlo de «revelación de secretos» cuando la información sobre los presos políticos en Cuba, especialmente los manifestantes del 11 de julio, es de conocimiento público. «Los mismos familiares de los presos políticos dan actualizaciones… Cualquier muchacho del 11J, todo el mundo sabe cuándo va a hacer su juicio, cuántos años de sentencia tiene», afirmó, señalando que los medios oficiales, como el periódico Granma, han publicado sentencias de muchos de estos prisioneros.

La audiencia de hoy ha dejado en evidencia las dificultades que enfrentan los presos políticos en Cuba. Con determinación, concluyó su mensaje reiterando que seguirá luchando por su libertad y apelará a todas las instancias posibles. Mientras tanto, la espera por la sentencia continúa, en un entorno donde las irregularidades judiciales parecen ser la norma.