El Secretario General de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, se pronunció contundentemente sobre la crisis en Venezuela en un reciente mensaje publicado en la plataforma X (anteriormente conocida como Twitter). A través de su cuenta oficial, @Almagro_OEA2015, Almagro instó a la comunidad internacional a tomar acciones más allá de las simples condenas verbales sobre las violaciones a los derechos humanos en el país sudamericano.

En su mensaje, Almagro dejó clara su postura sobre la necesidad de pasar de la retórica a la acción: “No nos sirve condenar la tortura si no actuamos para que se haga justicia al respecto. No nos sirve condenar las desapariciones forzadas si no actuamos para que se haga justicia al respecto. No nos sirve condenar la prisión política si no actuamos para que se haga justicia al respecto”.

Estas declaraciones fueron parte de su intervención en el Consejo Permanente de la OEA, donde subrayó que la crisis de derechos humanos en Venezuela ha sido objeto de múltiples denuncias y resoluciones en organismos internacionales, pero sin una respuesta efectiva para garantizar la justicia a las víctimas.

El mensaje de Almagro refleja su preocupación por la persistente violación de derechos fundamentales en Venezuela, incluidas las denuncias de torturas, desapariciones forzadas y la existencia de presos políticos, temas que han sido ampliamente documentados por organizaciones como la ONU y Human Rights Watch. Almagro insistió en que las condenas internacionales deben ir acompañadas de acciones concretas que lleven a la rendición de cuentas de los responsables.

La comunidad internacional, según Almagro, tiene un papel clave en asegurar que los crímenes no queden impunes. «Tenemos que actuar para que haya justicia. Cada uno de nosotr@s aquí y en todas partes», concluyó.

El llamado del Secretario General se produce en un momento de creciente tensión política y social en Venezuela, donde el presidente Nicolás Maduro ha sido señalado por perpetuar un régimen autoritario que oprime sistemáticamente a la oposición y restringe las libertades civiles. A pesar de las elecciones celebradas en julio de 2024, en las que Edmundo González Urrutia resultó electo como presidente, Maduro ha mantenido el poder, desatando una nueva ola de represión y denuncias internacionales.

La postura de Almagro refuerza la necesidad de mantener la presión internacional sobre el régimen venezolano para garantizar que los responsables de las violaciones de derechos humanos sean llevados ante la justicia y que el pueblo venezolano pueda vivir en un país libre de persecución política.

Este llamado a la acción es un recordatorio de que la comunidad internacional no puede limitarse a emitir declaraciones simbólicas, sino que debe trabajar para garantizar un futuro en el que la justicia prevalezca en Venezuela.