En medio de una creciente controversia en Cuba, Jorge Reina Pallarols y Arlety Llerena, padres de Jorgito, un niño diagnosticado con leucemia, han alzado sus voces en redes sociales para criticar la utilización de su caso por parte de las autoridades cubanas con fines políticos. Ambos expresaron su indignación por la politización de su esfuerzo por encontrar el tratamiento adecuado para su hijo, luego de que el portal oficialista «Razones de Cuba» y el noticiero nacional cubano usaran su historia para vincularla al embargo estadounidense, conocido en Cuba como «bloqueo».

La denuncia del padre: “Es vergonzoso”

En una emotiva publicación en Facebook, Jorge Reina Pallarols arremetió contra las autoridades cubanas por lo que considera una «vergonzosa politización» del caso de su hijo. En su mensaje, criticó que los dirigentes cubanos vincularan la búsqueda de ayuda médica para Jorgito con el embargo, asegurando que el verdadero problema no es político, sino de salud.

“Es vergonzoso ver que las autoridades del país cubano le han dado un giro político a toda gestión de esperanza de vida”, escribió Pallarols. Explicó que, a pesar de confiar inicialmente en el sistema de salud cubano, tras dos recaídas de la enfermedad, las opciones terapéuticas en la isla se volvieron insuficientes. “Las opciones de Cuba brindaban un porcentaje muy bajo en sus tasas de éxito terapéutico”, añadió, destacando que el trasplante de médula ósea, necesario para salvar la vida de su hijo, no estaba disponible en el país.

El padre también expresó su agradecimiento hacia Estados Unidos, donde su hijo ha sido aceptado en el Nicklaus Children’s Hospital, un centro que cuenta con la capacidad para realizar el trasplante que Jorgito necesita. Además, mencionó la ayuda recibida por parte del senador Marco Rubio, quien intervino para acelerar el caso de su hijo tras varias negativas anteriores.

Pallarols finalizó su publicación pidiendo respeto por el dolor de su familia y subrayando que su única motivación es salvar la vida de su hijo. “Nunca expresamos nuestro dolor ni descontento, siempre buscamos opciones”, aclaró, reiterando que su lucha no tiene un trasfondo político, sino que busca darle a su hijo una esperanza de vida.

La madre de Jorgito: “Yo solo quiero que mi hijo tenga cura”

Sumándose al rechazo por la manipulación política de su caso, Arlety Llerena, madre de Jorgito, también publicó un mensaje en el que expresó su indignación por el uso de su historia sin su consentimiento. Denunció que su caso fue tratado en medios cubanos sin haber sido consultada y explicó que las decisiones médicas que ha tomado se basan en la necesidad de encontrar una solución real para salvar la vida de su hijo.

«Me siento indignada, por la razón de que fue sin mi consentimiento», afirmó, antes de explicar que tras dos tratamientos de quimioterapia intensiva y dos recaídas, las probabilidades de éxito en Cuba eran mínimas. Con una probabilidad de vida del 10%, la familia decidió buscar tratamiento fuera del país, ya que en Cuba no existe la posibilidad de realizar el trasplante de médula ósea necesario para su hijo.

Arlety explicó que continuar con los tratamientos invasivos en Cuba impediría que Jorgito pudiera viajar para recibir el trasplante en Estados Unidos, debido al delicado estado de salud que estos le provocarían. “Negamos el tratamiento [en Cuba], ya que fue aceptado en el Nicklaus Children’s [en EE. UU.], donde sí se le puede hacer el trasplante de médula que es la única probabilidad con más porcentaje de poder lograr su cura”, detalló.

Al igual que su expareja, Arlety concluyó con un llamado a centrarse en lo verdaderamente importante: salvar la vida de su hijo. «Yo solo quiero que mi hijo tenga cura, se salve y pueda llegar a transitar en la vida como un ser humano con salud», escribió, reafirmando que su objetivo es darle una oportunidad de vivir.

Un caso que refleja la lucha de las familias cubanas

Las declaraciones de Jorge Reina Pallarols y Arlety Llerena han generado una oleada de apoyo en redes sociales, tanto dentro como fuera de Cuba. Muchos han expresado su solidaridad con la familia y su rechazo a la politización de su dolor. Este caso pone de relieve las dificultades que enfrentan los ciudadanos cubanos cuando el sistema de salud local no puede ofrecer las soluciones médicas necesarias, y la forma en que situaciones personales se ven envueltas en el complejo entramado político entre Cuba y Estados Unidos.

Para los padres de Jorgito, el objetivo es claro: salvar la vida de su hijo, libre de manipulaciones y agendas políticas. En sus publicaciones, ambos han dejado claro que su único interés es buscar el mejor tratamiento posible, y que la situación de su hijo no debe ser utilizada como herramienta política en un conflicto que trasciende su dolorosa realidad.