La reconocida periodista Annarella Grimal ha publicado en su muro de Facebook una noticia alarmante para los cubanos. Según su post, el primer ministro cubano, Manuel Marrero Cruz, anunció que el régimen de importación sin aranceles de medicamentos, alimentos y productos de aseo podría llegar a su fin a partir de septiembre. Esta medida, introducida en julio de 2021 para aliviar la crisis provocada por la pandemia de COVID-19, está siendo reconsiderada debido a las distorsiones que ha generado en la economía del país.
En la publicación, Annarella Grimal cita a Marrero, quien explicó durante las jornadas de trabajo del Tercer Periodo Ordinario de Sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP) en su 10ma Legislatura, que la prórroga de las excepciones arancelarias se ha extendido hasta septiembre. Sin embargo, indicó que nuevas leyes entrarán en vigor a partir de ese mes. «Hay muchas distorsiones detrás de esta medida que la aprobamos para beneficiar al pueblo (…), pero ha sido esto tomado por personas que se dedican a traer inmensas cantidades de productos para comercializar en un mercado negro a unos precios excesivos y abusivos», señaló Marrero.
La solución propuesta por el primer ministro es sustituir la entrada libre de estos productos esenciales por la venta controlada en la red de comercio interior, que es propiedad del Estado y de los militares cubanos. Aún no se ha especificado si los precios de estos productos se fijarán en moneda nacional o en divisas.
Grimal destaca que la eliminación de esta medida tendría un impacto significativo en la población cubana, que depende en gran medida de estas importaciones debido a la escasez crónica de medicinas y alimentos en la isla. En marzo de este año, el presidente cubano Miguel Díaz-Canel reconoció la falta de soluciones a corto plazo para el déficit de medicamentos e insumos médicos, afirmando que «la mejor respuesta que podemos darle a nuestra población en tiempos tan difíciles es la calidad de los servicios, con carencias, las vamos a tener, vamos a seguir con carencia de medicamentos».
Asimismo, el gobierno cubano ha intentado frenar la inflación, que ha superado el 335% en los últimos tres años, mediante la fijación de precios de los alimentos. Annarella Grimal advierte que la posible eliminación de la exención de aranceles a las importaciones personales podría agravar aún más la situación económica de las familias cubanas, que ya enfrentan una elevada inflación y una persistente escasez de productos básicos.
Desde su implementación, la medida de importación sin aranceles ha sido prorrogada trimestralmente. Sin embargo, su posible eliminación en septiembre podría tener consecuencias devastadoras para la población, especialmente en un contexto donde faltan más de 250 productos del cuadro básico de medicamentos y la disponibilidad de alimentos es limitada.
A continuación el post íntegro de Annarella Grimal:
¿Gobierno de Cuba pondrá fin a importación sin arancel de medicamentos, alimentos y aseo?
El primer ministro cubano Manuel Marrero Cruz anunció el jueves en La Habana que a partir de septiembre podría cambiar el régimen de importación —en estos momentos sin costo— de medicamentos, alimentos y aseo por supuestas “distorsiones” en la medida a la que atribuye los altos precios en Cuba.
Las declaraciones fueron hechas durante las jornadas de trabajo del Tercer Periodo Ordinario de Sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP) en su 10ma Legislatura, y han pasado desapercibidas por el anuncio de la alarmante disminución poblacional.
El mandatario dijo que “se extendió hasta septiembre la prórroga de las excepciones arancelarias a la importación por personas naturales de medicamentos, alimentos y aseo”, aunque adelantó que, a partir de ese mes, entrarán en vigor otras leyes.
“Hay muchas distorsiones detrás de esta medida que la aprobamos para beneficiar al pueblo (…), pero ha sido esto tomado por personas que se dedican a traer inmensas cantidades de productos para comercializar en un mercado negro a unos precios excesivos y abusivos”, dijo el primer ministro como causa de la posible revocación de la medida.
A priori, la solución que sugiere Marrero es sustituir la entrada libre de los productos de primera necesidad por la venta de estos en la red de comercio interior —propiedad del Estado y de los militares cubanos—, sin precisar si los precios se fijarán en moneda nacional o en divisas.
“Nosotros estamos trabajando firmemente en dotar a nuestro sistema de tiendas con alternativas de productos para tomar medidas después del mes de septiembre”, afirmó.
La decisión de permitir la libre importación de medicamentos, aseo y alimentos se remonta al mes de julio de 2021, cuando el país atravesaba los peores momentos de la pandemia de la COVID-19. Inicialmente concebida hasta diciembre de ese año, la medida se había prorrogado cada tres meses.
De eliminarse en septiembre próximo, la población cubana, que depende en gran medida de la generosidad procedente del extranjero, sería la principal perjudicada ante la escasez crónica de medicinas, con faltantes de más de 250 productos del cuadro básico, así como de comida en la isla.
En fecha tan reciente como marzo de este año, el gobernante cubano Miguel Díaz-Canel sugirió que su Administración no tiene soluciones a corto plazo para suplir el déficit medicamentos e insumos médicos y que, en su defecto, » la mejor respuesta que podemos darle a nuestra población en tiempos tan difíciles es la calidad de los servicios, con carencias, las vamos a tener, vamos a seguir con carencia de medicamentos», dijo.
En cuanto a los alimentos, el Gobierno tomó la decisión de topar los precios para intentar frenar la escalada especulativa resultado de una inflación de más del 335% en los últimos tres años.
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