Matanzas, Cuba. La profesora y activista cubana Alina Bárbara López Hernández, fundadora y codirectora del medio CubaXCuba, sufrió una violenta detención el día 18 de junio mientras se dirigía a La Habana. En un relato conmovedor y detallado, López Hernández narra los momentos de tensión y brutalidad policial que vivió junto a su acompañante, Jenny.

El Incidente

Alina Bárbara López Hernández relata que se encontró en camino a La Habana cuando un carro de policía, que la seguía desde Matanzas, ordenó detener el vehículo en el que viajaba. A pocos metros del punto de control de Bacunayagua, los oficiales le pidieron que bajara y entregara su carnet de identidad. Desde el inicio, la oficial encargada de su detención se mostró grosera y agresiva, refiriéndose a ella de manera despectiva y utilizando técnicas de artes marciales para someterla.

“Me agarró por los hombros e hizo una técnica de barrido con los pies, lanzándome al aire y provocando que cayera de espaldas”, narra López Hernández. El golpe fue tan fuerte que sintió un intenso dolor en la cabeza y un gusto a sangre en la garganta. La oficial, lejos de preocuparse por su bienestar, la arrastró hasta el carro patrullero, donde continuaron las agresiones.

Uso excesivo de fuerza

La situación se agravó cuando la oficial se subió sobre Jenny Pantoja, aplicando una presión peligrosa sobre su diafragma, lo que le impedía respirar. En un intento desesperado por defenderse, López Hernández instintivamente trató de agarrarse de algo, lo que fue interpretado por los oficiales como un “atentado”.

Durante el trayecto de regreso a Matanzas, la profesora fue esposada con extrema dureza, sufriendo torceduras en las manos que le causaron un dolor insoportable y la dejaron con las muñecas amoratadas. “El dolor era tan grande que dejé de sentir mis manos, se me durmieron y enfriaron por falta de circulación”, describe López Hernández.

Acusaciones Falsas y Detención Arbitraria

Horas después de su detención, López Hernández fue instruida de cargos por “atentado” contra la oficial. Esta acusación, según ella, es completamente falsa y fabricada para justificar la brutalidad de los oficiales y evitar que se visibilicen los abusos. “Ellos aprovecharon muy bien para hacerme una acusación falsa de atentado”, afirma, destacando que la detención se realizó lejos de las cámaras de seguridad para evitar pruebas visuales de lo ocurrido.

Respuesta y Solidaridad

A pesar de la agresión y las falsas acusaciones, Alina Bárbara López Hernández permanece firme en su lucha por los derechos humanos en Cuba. Agradece el apoyo y solidaridad de numerosas personas que se han preocupado por su estado y condena enérgicamente las tácticas represivas del gobierno cubano. “No me voy a cansar de exigir una Cuba pacífica”, concluye, haciendo un llamado a la comunidad internacional para visibilizar y denunciar las constantes violaciones a los derechos humanos en la isla.

El testimonio de la profesora Alina Bárbara López Hernández no solo revela la brutalidad policial a la que fue sometida, sino también la estrategia del gobierno cubano para silenciar a las voces críticas.