En un informe contundente, seis mandatos de Naciones Unidas han acusado al gobierno cubano de cometer graves violaciones sistemáticas al debido proceso. El documento, publicado por Prisoners Defenders, expone cómo las autoridades cubanas incumplen derechos fundamentales durante los procedimientos judiciales y de detención.

El reporte señala que el régimen de La Habana practica arrestos arbitrarios, mantiene a los detenidos en condiciones inhumanas, y viola sistemáticamente el derecho a un juicio justo. Estas conclusiones se basan en la revisión de múltiples casos documentados por organizaciones de derechos humanos y observadores internacionales.

Entre las violaciones más destacadas, el informe resalta la falta de acceso a abogados independientes, la coacción de testimonios mediante tortura, y la detención prolongada sin cargos formales. Además, se denuncia que los prisioneros políticos son sometidos a tratos crueles y degradantes, tanto físicos como psicológicos, con el objetivo de quebrantar su resistencia.

Estos hallazgos subrayan la necesidad de reformas profundas en el sistema judicial cubano y el respeto a los derechos humanos fundamentales. Los mandatos de la ONU han instado al régimen cubano a adoptar medidas inmediatas para corregir estas prácticas y garantizar un sistema judicial imparcial y transparente.

La comunidad internacional, incluyendo diversas ONG y entidades de derechos humanos, ha manifestado su preocupación por estos abusos y ha llamado a una mayor presión diplomática para que Cuba cumpla con sus obligaciones internacionales en materia de derechos humanos.